Todos contra la pared, este es el equipo de José

Cuando Lehmann le atajó el penal a Cambiasso en el mundial del 2006, se empezaba a marcar el fin de una época fabulosa de Pekerman en los seleccionados argentinos (sub 20 y mayor). Hoy en la actualidad ese buen juego es disfrutado por el seleccionado de Colombia.

En la tarde del viernes se midieron de locales contra el débil seleccionado boliviano, y su victoria por 5 a 0 dejó mucha tela para cortar. En el comienzo del cotejo, los "cafeteros" trataban de generar juego pero sin ideas y con muchos nerviosismo, mientras los bolivianos trataban de aprovechar cada tenencia de balón con pases seguros y laterales para no perder la posesión rápidamente  El 4-2-2-2 de Pekerman con Macnelly Torres y James Rodríguez como volantes-enganches trataba de generar mas juego ante el 5-3-1-1 que propuso Bolivia. Con el pasar de los minutos, Bolivia se metía más atrás y le daba el balón a Colombia que empezó a consolidar como figura a Cuadrado, un lateral con potencia, habilidad y control que con cada subida de él se estremecía el arquero visitante Arias.

El primer gol fue un calco de la movilidad que pide José a sus dirigidos para asegurar fluidez y buen trato de pelota en los metros finales. Los dos delanteros de área salieron de la misma para generar espacio, Teo Gutierrez recibió en la media luna devolvió a Falcao que descargo a Cuadrado, este tiró el centro atrás (no me voy a detener en el off side)y Macnelly Torres definió para el 1 a 0. Lo mejor de Bolivia en ataque se vio en las pelotas detenidas o algún que otro remate de media distancia. En el Segundo Tiempo, Los colombianos salieron decididos a atacar  hasta conseguir el segundo, con un centro de un enchufado James Rodríguez que tras un rebote Valdés transformó en gol.

El tercer y quinto gol (Teo y Armero, respectivamente) fueron un calco con un pelotazo en profundidad dejando a sus delanteros cara a cara con el arquero. El cuarto de Falcao fue un llamado a la paciencia con un toqueteo intrascendente de pelota por momentos hasta lograr el desborde para el centro y la definición de Falcao.

Colombia ganó, goleó y gustó; está segundo y recuperó la memoria perdida a principios del siglo XXI. Aunque a la distancia parece lejos, espero con ansias el partido contra Argentina, pues de ante sala tiene un marco y perlitas de lujo que prometen un partido al nivel de los grandes Argentina vs. Brasil. Bolivia sigue su paso indigente por estas eliminatorias y lejos de encontrar el rumbo, parece perderlo cada vez más.