Empate y suspenso...

Independiente visito la provincia de Córdoba con toda el hambre de un triunfo que lo sacara de los puestos del descenso al menos por esta fecha. Lo mismo lo hicieron notar los 11 mil hinchas rojos que coparon la la tribuna visitante. Pero desde la previa se sabia que no iba a tener un rival sencillo, se enfrentaba con Belgrano, un equipo con una muy buena base en todas sus lineas, que te complica durante los 90 minutos y que necesitaba sumar para asegurar su clasificación a la copa sudamericana, un condimento mas que importante para un equipo del interior.

Y así fue la historia en el campo de juego, muy peleada en la mitad de la cancha, con dos defensas muy bien armadas que impedían los ataques rivales y sin arriesgar demasiado. Belgrano fue el que tuvo la primera ocasión de gol en 10 minutos aprovechando la velocidad de Melano ,quien le ganó en casi todas las pelotas la espalda a Villalba y a Morel, pero Tula evitó muy seguro la caída de su arco.

Independiente apostaba a la presión en la salida de su rival con las corridas de Caicedo y Fernández, con Vargas muy marcado y Montenegro muy impreciso a la hora de habilitar a sus compañeros. Así y todo contó con unas tibias chances de Mancuello y pero sufrió con todos los tiros de esquina de su rival, que era más punzante en la primera mitad.

El segundo tiempo fue idéntico al primero,con Melano perdiéndose un gol increíble a los 3 minutos, luego el Rojo avisó a los 11 minutos con un desborde de Mancuello que terminó en un centro donde la  combinaron Fernández, Caicedo y terminó rematando incómodo Montenegro.

El juego se puso muy ordinario,con equipos prestándose la pelota sin jugadas claras cerca de las áreas y es por eso que los técnicos decidieron meter mano y dispusieron los ingresos de Ferreyra, Galeano y el juvenil Eloy Rodríguez en el visitante, y de Zelarrayan junto al picante Pereyra en el local. Y de la mano de esos cambios las "emociones" llegaron sobre el final, primero a los 39 minutos luego de un tiro libre en la mitad de cancha, el fondo Rojo defendió muy mal y el Picante Pereyra fiel a su estilo enganchó y metió un gran remate estrellando la pelota en el travesaño, siendo así la chance más clara de todo el partido para el local.

Por un segundo se paralizaron los corazones de los Diablos, quien al ver esto se empezaban a conformar cada vez mas con el empate. Pero cuando el partido se moría, apareció el malevo Ferreyra encarando al área y habilitando al pibe Rodríguez, quien solo, nervioso y apurado remató de zurda y la pelota se fue rozando el segundo palo de Olave.

Así finalizó el partido,con un cero a cero para analizar, ya que a Belgrano por ser local se quedó con las ganas de regalarle los 3 puntos a su gente... pero el Rojo sabe que sumó un punto muy importante en su lucha por la permanencia, pero que recién mañana cuando juegue Argentinos se sabrá si realmente fue positivo.

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