Desde tiempo ancestrales nuestros abuelos, padres y tíos futboleros relacionaban el Domingo con el asado, la reunión familiar y el clásico de cada fin de semana. Tanto así que un Racing vs. River, muy probablemente, era motivo de chicanas y burlas entre hermanos y/o primos.
Un 7 de Abril de 2013, a las 14 de la tarde era la antesala perfecta para uno de los clásicos más viejos de la historia; y como tal, el partido en sí no podía decepcionar, estaba prohibido, los protagonistas no podían decepcionarnos.
Racing venía de vencer a Estudiantes con gol de Cámpora en el final del partido y River de empatar en un amargo 0 a 0 contra Velez. Era un aperitivo para darle ánimo al ganador de cara al campeonato para meterlo en la lucha. Si bien la primera llegada clara fue un remate de Camoranesi ante un seguro Barovero, River fue el que dominaba la pelota dándole un destino seguro con Ledesma como patrón del medio. A medida que pasaban los minutos, Lanzini empezó a ser el armador que Ramón quiere, por sus pies pasaban las jugadas más peligrosas, claro Racing le otorgaba espacios y tiempo para que lo sea. Sin tener llegadas descollantes que luzcan a Saja, los millonarios eran los claros merecedores del primer gol por su ímpetu para atacar y buscar al arco rival; esto favorecía el espectáculo al igual que las contras lideradas por Camoranesi o De Paul. Desde un corner, Lanzini envió un pase certero a la cabeza de González Pires que se liberó de la marca y conectó de cabeza colocándola en el ángulo. El gol motivó mas a River que siguió manejando las pelotas pero con un Racing que empezaba a desesperarse. En el segundo tiempo Racing contó con posibilidades para empatarlo, como un cabezazo de Zuculini en el travesaño, pero fue por que River no liquidó cuando pudo hacerlo y le daba vidas a Racing que sacaba coraje como el boxeador que todavía no cae. Pero sobre el final del partido en un despeje de la defensa millonaria, Zuculini (último hombre) quiso mandar la pelota al área nuevamente, Lanzini la interceptó y, como Cuevas ante Campagnuolo, se fue hasta Saja para eludirlo y liquidar el partido a falta de 4 minutos.
Racing no solo perdió, sino que además sigue mostrando irregularidades y diferentes caras; es una mezcla de guardería con asilo; Vietto demuestra que su participación en el sudamericano sub 20 no fue un mal espejismo, el pibe se acobarda en partidos importantes. River recuperó la memoria parcialmente y recuperó a Lanzini además de destacar el aplomo del pibe Basanta que no sintió el peso de debutar en un clásico. En la próxima, Racing visitará, en otro clásico, con San Lorenzo que empató con Velez en 1; por su parte River se medirá con Arsenal.
Un 7 de Abril de 2013, a las 14 de la tarde era la antesala perfecta para uno de los clásicos más viejos de la historia; y como tal, el partido en sí no podía decepcionar, estaba prohibido, los protagonistas no podían decepcionarnos.
Racing venía de vencer a Estudiantes con gol de Cámpora en el final del partido y River de empatar en un amargo 0 a 0 contra Velez. Era un aperitivo para darle ánimo al ganador de cara al campeonato para meterlo en la lucha. Si bien la primera llegada clara fue un remate de Camoranesi ante un seguro Barovero, River fue el que dominaba la pelota dándole un destino seguro con Ledesma como patrón del medio. A medida que pasaban los minutos, Lanzini empezó a ser el armador que Ramón quiere, por sus pies pasaban las jugadas más peligrosas, claro Racing le otorgaba espacios y tiempo para que lo sea. Sin tener llegadas descollantes que luzcan a Saja, los millonarios eran los claros merecedores del primer gol por su ímpetu para atacar y buscar al arco rival; esto favorecía el espectáculo al igual que las contras lideradas por Camoranesi o De Paul. Desde un corner, Lanzini envió un pase certero a la cabeza de González Pires que se liberó de la marca y conectó de cabeza colocándola en el ángulo. El gol motivó mas a River que siguió manejando las pelotas pero con un Racing que empezaba a desesperarse. En el segundo tiempo Racing contó con posibilidades para empatarlo, como un cabezazo de Zuculini en el travesaño, pero fue por que River no liquidó cuando pudo hacerlo y le daba vidas a Racing que sacaba coraje como el boxeador que todavía no cae. Pero sobre el final del partido en un despeje de la defensa millonaria, Zuculini (último hombre) quiso mandar la pelota al área nuevamente, Lanzini la interceptó y, como Cuevas ante Campagnuolo, se fue hasta Saja para eludirlo y liquidar el partido a falta de 4 minutos.
Racing no solo perdió, sino que además sigue mostrando irregularidades y diferentes caras; es una mezcla de guardería con asilo; Vietto demuestra que su participación en el sudamericano sub 20 no fue un mal espejismo, el pibe se acobarda en partidos importantes. River recuperó la memoria parcialmente y recuperó a Lanzini además de destacar el aplomo del pibe Basanta que no sintió el peso de debutar en un clásico. En la próxima, Racing visitará, en otro clásico, con San Lorenzo que empató con Velez en 1; por su parte River se medirá con Arsenal.
Por el bien del fútbol como debe ser RIVER sigue en lo alto, algo escuché del 2º tiempo en este retorno a ganar clásicos tras dos años, que sea el primero de los enfrentamientos con grandes que le quedan y una escalada hacia EL CAMPEONATO.
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